Christian Bendayán
Es interesante notar que el arte amazónico contemporáneo ha ido más allá de los temas tradicionales de alegría, juerga y audacia.
La oferta actual incluye una perspectiva introspectiva que reconoce nuestros orígenes y enfatiza la importancia de respetar y conservar la naturaleza.
Además, proporciona una gran cantidad de información sobre mitos, leyendas y otras «realidades» paralelas en las que conviven los amazónicos, ofreciendo una visión única de su cultura.
El Arte de Christian Bendayán
Descubridor de los márgenes de la sociedad y pionero del color. Desde sus inicios, la obra de Christian Bendayán se ha adentrado en los rincones más perturbadores del color y la subjetividad marginal en el Perú contemporáneo.
Su enfoque pictórico, que se sumerge en la riqueza cromática del margen, está intrínsecamente ligado a la búsqueda de una imagen popular amazónica, tanto en su perfil más afilado como en su radicalidad adorable y estridente.
El viaje artístico de Bendayán, desde sus primeros pasos autodidactas hasta su maestría en la técnica, ha dotado al perfil popular y su versión masificada de una densidad alegórica única.
Esta densidad no solo se manifiesta en su trabajo, sino que también se extiende a la vida real, desde donde emergen inalteradas sus imágenes y retratos.
La vida que Bendayán examina en su lienzo parece emerger de una fantasía que resplandece oculta en los bajos fondos lumpen y la pobreza local.
En los extremos, este enfoque revela el color inusual de un objeto social no siempre identificado.
La luz negra, representada por el tubo de neón de la discoteca que rescata ciertos colores de las sombras, explica de manera magistral el proceso de la mirada de Bendayán, resaltando la vida y el brillo en la oscuridad.
Este proceso se manifiesta no solo en la mimética redención de la cultura visual y nocturna regional y los iconos de la pintura popular amazónica, sino también en la exhumación y resplandor de lo que la presión y la convención intentan evadir de la mirada que se pretende sublime.
Bendayán fusiona el costumbrismo y lo alegórico, creando escenas que desafían la clasificación entre retrato violento y homenaje.
Sus obras buscan una representación que elimine las barreras del retrato simple, desplazando la pictoricidad al terreno de la ambivalente aparición del decorado plano de la pintura mural tradicional de Iquitos y resaltando la perspectiva de la ilustración pop masiva.
Entre almanaques, referencias cultas desvirtuadas con alegría y viñetas crudas, el resultado es un breve fulgor kitsch, efímero, que enfatiza una vertiente popular de manera enfática y a veces la oculta, revelando un ethos acalorado y radical que ruge detrás de lo que aparenta ser un simple decorado vital y exploratorio.
Bendayán logra capturar la intensidad de la vida diaria y sus imágenes, infundiendo vitalidad precisa en cada intervención sobre la piel y diversas superficies.
En sus obras, Bendayán construye una urdimbre precisa, y desde su trama de fondo emerge la visión imperfecta de una utopía tropical y crepuscular.
Esta visión, edénica y enrarecida, asume metafóricamente el ordenamiento y génesis, guiñando a la raíz judeotropical de su genealogía charapa y abrazando la idea de una filiación común, una identificación cultural, ética y estética con el margen y su redención, tanto dentro como fuera del lienzo.
Christian Bendayán, con sus pinceles y colores vibrantes, continúa explorando las fronteras de la identidad, la cultura y la estética en el lienzo de la Amazonía peruana.